En muchas situaciones, y desafortunadamente sobre todo en la acción humanitaria, al sector del saneamiento se le ha dado una menor prioridad que a otros sectores como son el abastecimiento o tratamiento de agua, el refugio o la distribución de alimentos.
Sin embargo, muchas de las enfermedades más comunes y fatales que se producen durante las emergencias son las que se encuentran vinculadas directamente con la ausencia de servicios de saneamiento, instalaciones inadecuadas o malas prácticas de higiene.
El saneamiento en emergencias es un campo de trabajo complejo, grande y dividido en varias sub-disciplinas. En la acción humanitaria se intenta atender generalmente los sectores de:
- Drenaje de aguas en superficie
- Gestión y tratamiento de aguas usadas
- Gestión y disposición de excreta
- Gestión y disposición de desechos sólidos
- Gestión y disposición de desechos médicos
- Gestión de cadáveres
- Control de vectores
Todas estas disciplinas, dado el nivel de especialización que requieren, se les debe dar la máxima prioridad en una emergencia para evitar una disposición de excreta insegura o una dispersión de agentes insalubres en el entorno, y en consecuencia, la transmisión de enfermedades e infecciones.